Los peligros de mezclar medicamentos con alcohol

A mother and her adult daughter enjoy a meal and a glass of wine outdoors at a restaurant.

Conocer las interacciones entre el alcohol y los medicamentos con receta y los de venta libre puede ayudarte a evitar complicaciones de salud potencialmente graves.

La próxima vez que bebas una copa de vino con la cena o que disfrutes de algún coctel para celebrar, ten presente esto: Beber alcohol, incluso un poco, podría ser peligroso si estás tomando determinados medicamentos.

Una gran cantidad de medicamentos de uso frecuente, entre ellos los de venta libre, pueden interactuar con el alcohol modificando la forma en que el medicamento actúa en el cuerpo y podrían producirse síntomas desagradables o incluso complicaciones que pueden poner en riesgo la vida. Sin embargo, muchas personas no son conscientes de estos riesgos, incluso cuando están escritos en la etiqueta del medicamento.

Interacciones entre el alcohol y los medicamentos

  • El alcohol puede acelerar la absorción y metabolización de un medicamento en el organismo, haciéndolo menos efectivo o, en algunas situaciones, anulando su efecto por completo.
  • También puede retardar el tiempo que el medicamento tarda en absorberse y metabolizarse, aumentando los niveles del medicamento en el torrente sanguíneo, lo que en última instancia puede volverse tóxico.
  • El alcohol puede intensificar los efectos secundarios de un medicamento o generar síntomas nuevos como náuseas, vómitos, dolor de cabeza y somnolencia.

Ten presente que algunos medicamentos, como los analgésicos, los medicamentos para el resfriado y la alergia, tienen más de un ingrediente que puede interactuar con el alcohol. Otros medicamentos, como los jarabes para la tos, pueden de hecho tener alcohol como ingrediente, y eso puede aumentar aún más los efectos.

Las advertencias sobre el alcohol deberían indicarse en la etiqueta con la información sobre los ingredientes del medicamento o en la información de tu receta médica, pero también puedes consultar a tu médico o tu farmacéutico si tienes alguna inquietud sobre los ingredientes de tu medicamento.

Medicamentos comunes que interactúan con el alcohol

Hay numerosos tipos de medicamentos, tanto con receta como de venta libre, que tienen el potencial de interactuar con el alcohol, dependiendo de la cantidad y la frecuencia con que bebas. Solamente vamos a señalar algunos de los comunes y sus respectivos efectos secundarios, pero puedes encontrar una lista más completa aquí.

Antes de tomar cualquier medicamento, es preferible no beber hasta que tu médico o tu farmacéutico puedan determinar si es seguro. Es importante que seas honesto y sincero con ellos sobre la cantidad y la frecuencia con que bebes para evitar cualquier interacción peligrosa.

  • Medicamentos para el dolor: La combinación de alcohol con antiinflamatorios no esteroideos (AINE) como Advil®, Motrin® y Aleve® puede aumentar el riesgo de úlcera estomacal, sangrado interno y náuseas. Si bebes regularmente y tomas acetaminofeno (Tylenol®) corres el riesgo de desarrollar daño hepático grave. Los analgésicos con receta como la oxicodona o la hidrocodona son particularmente peligrosos si los tomas cuando consumes alcohol y podrían provocar una somnolencia que puede poner en riesgo la vida, dificultad en el control de los movimientos y una respiración peligrosamente lenta.
  • Antibióticos: Los antibióticos en general causan efectos secundarios como náuseas, malestar estomacal o diarrea, pero el alcohol empeora estos efectos secundarios. Algunos antibióticos, como Flagyl®, Tindamax® y BactrimTM, nunca deben mezclarse con alcohol porque pueden causar problemas cardíacos o daño en el hígado.
  • Anticoagulantes: Beber alcohol mientras estás usando warfarina eleva el riesgo de sangrado que puede poner en riesgo la vida. Tu médico tendrá que controlarte atentamente si piensas beber mientras usas este medicamento.
  • Comprimidos para dormir: Los medicamentos que se recetan para dormir de hecho están preparados para ayudar a que te duermas. Cuando los mezclas con alcohol, esos efectos son más fuertes y provocan complicaciones tales como mareos, respiración más lenta, dificultad en el control de los movimientos y somnolencia excesiva.
  • Medicamentos para la alergia: Somnolencia y mareos son efectos secundarios comunes de los antihistamínicos. La combinación de antihistamínicos con alcohol te da todavía más sueño y podría causarte confusión o desorientación.
  • Medicamentos para la diabetes: Nunca debes tomar alcohol si tomas metformina. De hecho, la metformina tiene una advertencia destacada dentro de un recuadro, que representa la advertencia más estricta establecida por la FDA. En casos raros, el consumo de alcohol con metformina puede provocar acumulación de ácido láctico en el organismo y causar desorientación, latidos cardíacos rápidos, calambres o dolores musculares intensos o dolor y malestares estomacales. Si usas insulina para controlar la diabetes, el alcohol aumenta el riesgo de hipoglucemia.
  • Medicamentos para la acidez: Si tomas medicamentos como Nexium® o Prilosec® para reducir la acidez y la indigestión, mantente alejado del alcohol. El alcohol aumenta la producción de ácido en el estómago y eso contrarresta los efectos beneficiosos de los medicamentos para la acidez. En lugar de alivio, sentirás efectos secundarios desagradables como dolor de cabeza, náuseas y además, acidez.
  • Medicamentos para la presión arterial: Es particularmente peligroso mezclar el alcohol con medicamentos para la presión arterial como los betabloqueantes y los inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina (ACE, por sus siglas en inglés), ya que el alcohol puede bajar de manera excesiva la presión arterial y provocar mareos y latidos cardíacos rápidos, aumentando así el riesgo de caídas o desvanecimientos.
  • Medicamentos para el colesterol alto: Las estatinas pueden afectar la función hepática. Por lo tanto, la combinación de estatinas con alcohol puede aumentar el riesgo de daño hepático o enfermedad hepática.
  • Medicamentos para la ansiedad: El alcohol y los medicamentos para la ansiedad tienen efectos secundarios similares y al combinarse, estos efectos secundarios se agravan. Si bebes y tomas medicamentos para la ansiedad, probablemente sientas cosas como somnolencia extrema o respiración lenta.
  • Antidepresivos: Mareos, falta de coordinación, somnolencia excesiva y desvanecimientos son posibles efectos secundarios de beber mientras estás tomando antidepresivos. En particular, no se recomienda beber si estás tomando sertralina (Zoloft®), ya que el alcohol de hecho puede agravar la sensación de depresión.
  • Medicamentos para el TDAH: Beber alcohol mientras tomas medicamentos para el TDAH puede agravar los efectos secundarios de dichos medicamentos. Puedes tener sueño, baja concentración, problemas cardíacos o mareos.

También hay varios suplementos herbarios que no se deben tomar con alcohol. Si se mezcla con alcohol, la kava puede hacerte sentir somnoliento o provocar daño en el hígado; la hierba de San Juan puede darte mareos, sueño y dificultad para concentrarte; la manzanilla, la valeriana y la lavanda pueden darte mucho sueño. Ten presente que la FDA no regula los suplementos y por eso tal vez no tengan las etiquetas de advertencia apropiadas.

Habla con tu farmacéutico

Si tus beneficios de farmacia incluyen Express Scripts® Pharmacy puedes comunicarte 24/7 con nuestros farmacéuticos especialmente capacitados. Ellos pueden responder todas tus preguntas sobre medicamentos e informarte si alguno de los ingredientes de tus medicamentos actuales puede interactuar con el alcohol o alguna otra cosa. También podrían sugerirte un medicamento alternativo que sea menos riesgoso de tomar si consumes alcohol.

Fecha de publicación: 11 de enero del 2023

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